Después de estar un día entero en la habitación del hostal debido al temporal de viento y lluvias que azotaba a la zona, además de tener algo de pereza y falta de horas de sueño (igual que ahora jajajaja), salí temprano en la mañana del día siguiente para conocer Pucón en sí mismo e improvisar algún paseo. Fue el único día en que pude ver el sol jajajajaja.
Una de las cosas que me llamó la atención del hostal fue esta casa del árbol, una idea muy visionaria y romántica, paso el dato de que no es muy caro alojarse ahí. Debe ser bastante entretenido, en fin. Apenas salí, me propuse recorrer parte de la zona de La Poza que está frente al hostal.
¿No es hermoso Pucón? Esto es el lago Villarrica, las aguas estaban muy tranquilas en ese momento. En el fondo, las embarcaciones que suelen hacer salidas por el lago como paseos turísticos, el cerro donde viven las personas más ricas de la ciudad en un gran condominio exclusivo y… un regalito de la naturaleza, inicialmente le decía arcoiris, pero investigando más, este fenómeno se llama parhelio, ya con eso estaba más que feliz y daba por pagado mi viaje jajajaja. En inglés, les llaman sundog.
Toda esta zona de Pucón en forma de bahía recibe el nombre de La Poza. No puedo decir que sea una bahía protegida como en otros puertos y otras ciudades costeras porque el viento que recibíamos en la noche (tremendas ráfagas) nos llegaba de frente jajajaja, me hubiera gustado tener una tormenta eléctrica o una nevazón, pero no se pudo 🙁
El sector de La Poza, además de tener un muelle de embarcaciones pequeñas, también es una especie de costanera para los turistas, con bancas para sentarse y disfrutar de la vista al lago, además de flores. El muelle nuevo fue inaugurado cerca del año 2010. Arriba, ven también representaciones del pueblo indígena de la zona: los mapuches.
Una visión otoñal del lago Villarrica desde el mirador. De no haber nubes, probablemente también se vería el majestuoso e imponente volcán Villarrica.
La Poza también tiene un pequeño humedal, así que es posible observar fauna en Pucón sin moverse de la ciudad. La camarita amiga nos muestra una familia de cisnes compuesta por una pareja, junto a un polluelo. Como dato curioso, los cisnes son animales que tienen una sola pareja durante toda su vida.
En el fondo, Pucón es una belleza, en primavera debe ser muy bonito poder disfrutar de las flores y los brotes, sin tener la demanda ni los precios que hay en verano, pues Pucón como buen sitio turístico, se repleta en esos días y su público objetivo es de un poder adquisitivo mayor.
Una vez que tomé varias fotos de La Poza y disfruté de los paisajes maravillosos del lago Villarrica, todo esto frente a mi hostal, me dispuse a caminar hacia los terminales de buses de la ciudad, los que se concentran en la esquina de Palguín y Uruguay (Tur Bus es la excepción, está más lejos). El pueblo en sí es bastante pequeño y caminable, en ese sentido, casi todas las opciones de alojamiento (muchas) entre Caupolicán y Colo Colo me parecen atractivas si se desea caminar poco, hay otras que ofrecen más servicios y están un poco más lejos.
Esto es el Terminal de Buses de la empresa JAC, que actualmente pertenece a Tur Bus. En este lugar, abordé un taxi para hacer el city tour. Si bien es cierto que podía hacerlo caminando, hablar con taxistas y personas de la zona te da otra perspectiva del lugar, a mí no me preocupa tanto conocer el lugar, sino las personas que viven ahí, cómo viven, sus sueños, sus dolores, sus chistes. Las personas son las importantes y las que marcan, no una postal.
Lo primero que hicimos fue subir al Cementerio Municipal de Pucón. En el hostal había gente que fue en bicicleta para allá, pero yo no tengo rodillas muy sanas como para intentar pensar en esa idea (y tampoco uso bicicleta, sorry bicilovers). El camino que tomamos fue mucho más directo que el que aparece en el mapa y ciertamente es muy empinado, mis rodillas agradecieron no haber ido caminando jajajaja.
Si bien es cierto que soy una persona cristiana, no me interesa ir a conocer santuarios, monasterios, templos ni mucho menos cementerios, a mí me causa un poco de risa que las personas vayan a conocer iglesias en otras ciudades o países, pero que nunca vayan a una en su ciudad, ¿no es curioso? En fin, la gracia de venir al cementerio es porque es un EXCELENTE MIRADOR de la ciudad, meramente por eso.
¿Ven la tremenda vista que hay? Vale la pena y es gratis, ¿qué mejor? Eso sí, para personas con problemas de movilidad, por favor, vayan en auto, la subida tiene harta pendiente.
Esto es el cementerio propiamente tal, bastante bonito la verdad.
Y esto se llama sacarle provecho a los rayos del sol desde el mirador, insisto en que Pucón es una ciudad pequeña y muy hermosa.
Desde el Cementerio, nos fuimos a la Playa Grande de Pucón que se extiende desde la Península donde viven los ricos hasta la desembocadura del río Trancura, a poco menos de 5 kilometros del lugar. En verano tiene más gente por si acaso jajaja, para más datitos ver en foursquare.
Por la época obviamente, la playa estaba vacía. Las arenas son negras y finas, como en varias playas lacustres del sur de Chile, pues son rocas volcánicas pulverizadas. La verdad es que Chile está lleno de volcanes, ¡como será que tenemos volcanes activos hasta en el extremo sur de la Patagonia!
Y bueh, el city tour de la ciudad en sí misma termina acá, antes de decirle un nuevo destino al taxista, él recibió una llamada para hacer otra carrera y sin siquiera consultarme por si deseaba conocer más, dijo que se “desocupaba en 2 minutos“. Se perdió una platita extra y una oportunidad, porque quería conocer una cascada cercana a la ciudad (Salto El Claro) … cosa de él, ustedes no pierdan oportunidades así pues, no sean despistados.
Le pedí que me dejara en el hostal, a ver adónde se me ocurría ir ahora… paso el dato, se hacen tours guiados gratuitos por Pucón pero solo en inglés (obviamente se paga propina), ellos se llaman Free Tour Pucon, por si quieren practicar el inglés al escuchar.
¡Nos leemos! Bendiciones y muchos saludos para ustedes, que Jesús ande al ladito suyo :)!