Hace varios años quería conocer el Proyecto Ave Fénix en el Cajón del Maipo, pero no tenía mucha información disponible para poder realizarlo. Así que esto viene a ser una ayuda para mostrar a la comunidad este proyecto y ayudar a quienes quieren visitarlo. Personalmente me interesé en el tema debido a mi afición a los transportes y cierta curiosidad por la historia. Arranquemos 🙂
Este es un mapa con la red ferroviaria de Chile que está en la sede del Consejo de Monumentos Nacionales (pueden visitarlo en el Día del Patrimonio Nacional, último domingo de mayo). Antiguamente existía un servicio de trenes administrado por los militares para conectar la zona de Puente Alto, en el sur de Santiago, y El Volcán, en el Cajón del Maipo.
No solamente existía este ferrocarril (llamado Ferrocarril Militar El Volcán), sino también existía otro que conectaba Plaza Italia con Puente Alto tal y como actualmente lo realizan las Líneas 4 y 5 de Metro de Santiago por avenida Vicuña Mackenna y Concha y Toro. Este ferrocarril recibía el nombre de Llanos del Maipo. Algunas estaciones de Metro reciben nombre debido a este tren, como es el caso de Bellavista o Los Quillayes.
La estación Puente Alto era un punto de conexión entre estos dos ferrocarriles, lo que se aprecia claramente en el diorama realizado por el artista Zerreitug y que se encuentra en esa misma estación. La ambientación del diorama está realizada pensando en el año 1928. Sin duda, una de las cosas positivas de trabajar en esa estación fue apreciar este diorama con más detalle 😉
Actualmente para ir al Cajón del Maipo no existe el tren. Los habitantes disponen de vehículos particulares y tienen la opción de tomar los buses rurales Metrobus 72 administrados por la empresa Tur Maipo. Las vías fueron levantadas y los trenes abandonados. El ferrocarril funcionó entre 1910 y 1985.
Bueno, ustedes saben que en Chile se pierde mucho patrimonio e historia debido a que no es una de las prioridades nacionales, sociales y muy pocos tienen el dinero como para realizar este tipo de cosas. Pues bien, el Proyecto Ave Fénix es una iniciativa de Luis León junto a otros colaboradores para la conservación de parte de lo que fue el Ferrocarril Militar El Volcán.
Luis no es una persona millonaria, más bien humilde, pero que vivió gran parte de su vida ligado a este ferrocarril y no quiso dejarlo morir así nada más. El proyecto tiene algunos fondos de auspicios pero mayormente se sostiene con aportes voluntarios. Es común que durante los fines de semana lleguen algunos buses repletos de personas de tercera edad que están realizando viajes especiales. Ellos suben al tren y recuerdan viejos tiempos a cambio de una propina. Luis es el conductor y relator del viaje también.
Por el viaje, Luis te entrega un boleto de cartón como los de antes. Realmente el viaje es un agrado. Es cierto que no hay tanta línea de tren para andar pero entre los recuerdos y las vueltas que da es imposible no salir contento 🙂 . Él explica que el proyecto tiene varias aristas, pues es una iniciativa ferroviaria, patrimonial, cultural y turística.
El trabajo de restauración hecho por él y sus colaboradores es brillante. Más allá del buen trabajo técnico, lo que fascina es el amor que pusieron en esto. En un país como el nuestro, tener estas cosas patrimoniales se debe a la genialidad de algunos personajes que se arriesgan y ponen sus energías en esto, no hay una política estatal real que conserve en buenas condiciones nuestro patrimonio.
El proyecto abre sus puertas durante los fines de semana y festivos que es donde más concentran visitas. No hay una tarifa única, sino que puedes hacer tu aporte voluntario. Llegar es bastante sencillo, puedes ir en Metrobus o en taxi-colectivo hasta la localidad de El Melocotón. El Proyecto Ave Fénix se encuentra frente al Restaurant El Montañés, en pleno Camino al Volcán.
En este último mapa se aprecia el lugar exacto donde está el Proyecto Ave Fénix. Es cosa de que se alejen para que puedan identificar El Melocotón (ese pueblo donde se encuentra) y el resto del Cajón del Maipo. Muchos saludos para nuestros lectores y también a don Luis León & compañía por todo el hermoso trabajo que hacen y el buen recibimiento que tuve con ellos.