Esta vez vengo a hacer un relato especial, sobre uno de los mejores días del año pasado y el comienzo de un viaje inolvidable en todo sentido. Viajar a Isla de Pascua es una de las cosas más bonitas que me han pasado, lo considero toda una bendición y espero poder transmitirles no solo los paisajes, sino que también los sentimientos y emociones.
Día 01: Llegada a Isla de Pascua / Sendero Te Ara o Te Ao (Volcán Rano Kau – Orongo) / Atardecer
Bueh… llegué durante las primeras horas de la tarde a Isla de Pascua en este hermoso Boeing 787 Dreamliner de LAN. El plato fuerte de este blog son los relatos de viaje y cosas relacionadas con transporte, así que en esta ocasión no daré mayores detalles del vuelo pues ya tienen ese relato completo y pormenorizado (Parte 1, Parte 2 y hasta un Video).
Yo estaba flotando de felicidad. Durante las semanas anteriores había tenido mucho estrés gracias a mi odiada universidad, así que el hecho de tener unas “vacaciones” sin cuadernos, ni profesores, ni trabajos estresantes ya era algo bonito. ¿Viajar en el avión? Un sueño… yo no necesitaba quedarme en Isla de Pascua, ya con el vuelo estaba más que feliz jajajaja, me sentía como un futbolista que hace el gol de sus sueños (como el de Sierra en el Mundial del 98 o el penal de Alexis en la Copa América), ya el resto del partido era algo que solo podía acrecentar mi sonrisa.
Personal del Hostal Tojika nos fue a buscar al Aeropuerto de Mataveri, acomodamos nuestras cosas en las habitaciones. Inicialmente yo había reservado una habitación individual pero remodelaron parte de las instalaciones y eso desapareció, así que tuve una habitación triple para mí solo jajaja. Yo no me quejo de estas cosas jajaja.
De ahí nos fuimos a comer empanadas de atún donde la tía Berta, que es una picada habitual en Isla de Pascua. Es el lugar con mejor relación precio/calidad. Otras empanadas más ricas (pero caras) están cerca del hostal Chez Jerome que también dicen que es bueno.
Saliendo de mi hostal, por la costanera de la isla tenía acceso a esta privilegiada vista frente al océano Pacífico. Se ven unas instalaciones de la caleta Hanga Piko, parte de las torres de aproximación de la pista para aeronaves de Mataveri y una de las laderas del extinto volcán Rano Kau.
Mi primera misión de ese día 11 fue caminar hasta Orongo. Dentro de mi itinerario, es lo único que tenía decidido, pues no me había informado mucho respecto a los panoramas de la isla, iba más bien con la idea de “sorprenderme” jijiji.
Me fui caminando por la costanera hacia arriba, Orongo está detrás de la cima del Rano Kau. En foto, el moai Ahu Riata y un minibús particular de la década del 90, marca Marcopolo. Me sentía libre al momento de caminar, recordaba que el día anterior había tenido que hacer trabajos y presentaciones para la universidad, que había estado muy muy estresado y acá… acá solo tenía que caminar, mirar el paisaje, corría brisa, podía disfrutar y absorber como esponja lo que mis ojos vieran 🙂
En el camino también vi varias diucas, se ven muchas en Isla de Pascua. Recuerdo que cerca de Mataveri también vi algunos caballos y me crucé con algunas personas que también estaban recorriendo la isla.
Gran parte de mi tarde la invertí haciendo el Sendero Te Ara o Te Ao que era lo que recorrían los isleños para hacer su ceremonia del tangata-manu (hombre pájaro). Esto es parte del Parque Nacional Rapa Nui y asumo que está dentro de lo que se cobra a los turistas en CONAF. Digo asumo, porque en esos días no había cobro 😀
El sendero completo está demarcado y es lo que les decía antes: subir el volcán Rano Kau y llegar a Orongo. Existe también un camino vehicular.
Como les decía, la sensación de paz era tremenda. Imaginaba Santiago y todo lo complejo que es vivir un 11 de septiembre en la ciudad… y contrastaba con esta tranquilidad, tema aparte es que no tenía señal de celular así que estaba realmente desconectado de todo.
Después de casi 1 hora y media de caminata, llegué al mirador del volcán Rano Kau. La sensación es hermosa, ¡no todos los días subes a un volcán extinto! La isla completa es la conformación y emergencia de varios volcanes que ahora están extintos… muy al estilo del cortometraje Lava.
A la distancia, una pareja de jóvenes exploraba el Rano Kau… una foto muy tierna, Isla de Pascua es un destino ideal para parejitas jajajaja.
Otra visión del Rano Kau. Según lo que he leído, los pascuenses usaron parte del Rano Kau como fuente de agua dulce y suelo agrícola. La foto que ven en la portada me la tomó una mujer que visitaba la isla con sus hijos. ¡Gracias por la foto! Un recuerdo genial 😀
Cerca de la hora de cierre y con harto sudor a cuestas, ¡llegué a Orongo! Ésta era una aldea ceremonial de los rapanui, un sitio arqueológico donde los guerreros bajaban por los acantilados para recoger un huevo del gaviotín pascuense (manutara). Actualmente este ave no se ve mucho en la isla 🙁
Siiiii… tenían que bajar y nadar todo eso, además de aguantar semanas o meses por el huevo. Esta competencia determinaba quién tendría el poder político para gobernar la isla. Es impresionante y sobrecogedor, sobretodo para personas poco atléticas como yo jajaja, yo no llego ni a la esquina en una competencia así.
En efecto, apenas cerró la CONAF, el encargado del lugar nos llevó a mí y un turista suizo en la camioneta pues… ¡estábamos muertos! Un factor a considerar es el calor pues el sol pega muy fuerte, yo terminé con las piernas calientitas y el suizo tenía ampollas. Pueden leer con más detalle esta travesía en el artículo especial de este sendero.
Nos dejaron cerca de Mataveri, así que aprovechamos de caminar otro poco y conversar de la vida. El suizo tenía como unos 60 ó 70 años, venía de visita a Chile por trabajo y aprovechó unos días libres para conocer la isla. Yo siempre estaré agradecido de los encargados de CONAF por llevarnos, pues no me imaginaba haciendo el camino de vuelta a pie jajaja. En foto, un almacén / minimarket de la isla.
Una vez que nos separamos, caminé el resto del trecho que quedaba al hostal. Lo que ven es la tranquila avenida Pont.
Si el vuelo fue bonito y la caminata al volcán Rano Kau + Orongo fue mágica… el tiempo extra de este día fue una delicia. ¡Miren ese atardecer! Dios es tan bonito cuando pinta atardeceres y hace estos regalos. Hermoso, yo lo podía ver desde una reposadera en el hostal jajajaja, ¡no tenía ni que pararme!
Y terminó así… una tarde mágica. ¿Me puedo quejar de algo? Insisto, ha sido uno de los días más lindos del año que recién pasó, poder estar en la isla y tener ese día era suficiente… podían devolverme a Santiago y quedaba con el corazón feliz, pero NOOOOOOOOOOO… hay más, ¡mucho más! Por cierto, todos los días el tiempo cambia y nunca verán el mismo atardecer… 🙂
Espero que todos estén pasando un buen día y Dios bendiga a mis lectores, ¡un abrazo gigante y nos leemos!
LA BITÁCORA del VIAJE ISLA DE PASCUA
– Día 01 Hostal Tojika / Volcán Rano Kau / Orongo
– Día 02 El avión / Pueblo de Hanga Roa / Danza Pascuense
– Día 03 Tortuga en Hanga Piko / Ahu Akivi / Playa Anakena / Te Pito Kura
– Día 04 Tour Full: Rano Raraku / Ahu Tongariki y más / Tahai
– Día 05 Buceo / Compra de artesanías / Fotos nocturnas
– Día 06 Jardín Botánico / Cuevas volcánicas / Alerta de tsunami
EXPERIENCIAS DE VIAJE DESTACADAS
– Vuelo en LAN Airlines: Santiago a Isla de Pascua (Boeing 787) (Parte 1)
– Vuelo en LAN Airlines: Santiago a Isla de Pascua (Boeing 787) (Parte 2)
– Vuelo en LAN Airlines: Isla de Pascua a Santiago (Boeing 787 – Premium Business)
OTROS POSTS SOBRE ISLA DE PASCUA: Ver el Cuaderno de Viaje completo
